Sidonie goes to La Riviera

El sábado pasado, tras haber dado decenas de conciertos por toda la geografía española y haber formado parte del cartel de varios festivales este verano, los Sidonie aterrizaron con su nave espacial en la mítica sala La Riviera para despedirse de la gira de El Fluido García.
A pesar de que la gira contaba como piezas estelares con las canciones de su nuevo disco, los barceloneses hicieron un repaso de toda su discografía.

Comenzaron el concierto con una de sus canciones favoritas, 'Alma de goma', para a continuación dar un paso hacia atrás en el tiempo y repasar temas de discos anteriores. Entre otros temas del Fluido García, como 'Tormenta de verano', 'Bajo un cielo azul', 'Carnaval', 'A mil años luz' o 'El bosque', los catalanes nos transportaron a finales de la década anterior con canciones de sus tres últimos discos, como 'Persona', 'Sylvia', 'Giraluna' o 'Costa azul', de La Costa Azul, 'La sombra' y 'Un día más en la vida', de El Incendio, o 'Fascinado', del disco homónimo.
Pero no sólo fueron las canciones las que nos hicieron viajar años atrás, ya que todo el concierto estuvo repleto de referencias a años pasados y anécdotas de los comienzos de esta banda, formada a finales de los noventa por Marc, Axel y Jes, que tanto ha evolucionado desde entonces. Quizás por ese motivo decidieron versionar a los MGMT, convirtiendo su popular 'Kids', en una magnífica 'Niños'.  A pesar de todo, los guiños al pasado no fueron los únicos, puesto que la banda no dejó de alabar la incorporación del guitarrista y teclista David T. Ginzo, también componente de la banda TUYA.

Posiblemente Sidonie sean conocidos en España como uno de los grupos más importantes de rock psicodélico actual, y ése es un título que demuestran que merecen no solo por su sonido, sino también por los shows que montan en cada actuación, en donde se recrean sobre todo con algunas de sus canciones más antiguas, como 'Feelin' down', 'Sidonie goes to London' o 'Sidonie goes to Moog', en las cuales desplegaron todas sus habilidades con la guitarra, el teclado, la batería -merecen aquí una mención especial las poses contorsionistas de Axel-, e incluso el sitar.
Tras la última canción los Sidonie se retiraron unos minutos al camerino, para aparecer de inmediato con dos de sus temas más importantes: 'Nuestro baile del viernes' y 'El incendio'.
La guinda del pastel vino de la mano de 'All I have to do is dream', versión de los Everly Brothers, que interpretaron en mitad de la sala en formato acústico rodeados de todo su público. El ingrediente que faltaba para hacer de éste un concierto épico.